No empezaré diciendo que este se trata de un trabajo sencillo. Puede llegar a ser estresante y agotador, a la par que se complica al inicio cuando uno no esta familiarizado con el ambiente y la forma de trabajo. Pero no es como si ello fuera diferente que en cualquier otro tipo de trabajo o emprendimiento.
Enseñar es para mí una tarea gratificante. Siento gusto al ver que un estudiante entiende un concepto o problema, y créanme que se nota cuando la persona finge entender en contraste a obtener un dominio completo.
Claro, no siempre termina bien. A veces un estudiante simplemente no posee las bases necesarias para poder enfrentar su ejercicio, a veces simplemente quieren que les demos la respuesta e irse. En ambos casos lo importante es elegir lo mejor para este y buscar explicar lo mejor posible sin sobrecargar con información.
Es esta discrecionalidad que poseen los tutores de LatinHire que resulta a la vez positiva como negativa. Es una responsabilidad y se siente como una importante. Sin embargo es bueno ver lo útil que resulta, puesto que ayuda a desarrollar grandes habilidades para el desempeño laboral propio. Una vez que se ha logrado calmar y explicarle a un estudiante furioso, ¿qué dificultad tendría manejar un jefe en un estado similar?
Tampoco deben entender que es un camino que se recorre solo. LatinHire apoya con sus recursos. Un mentor estará siempre allí revisando su trabajo, comentando y dando consejos para mejorar. Fue mi mentor el que me ayudo a seguir en el oficio, pues sus comentarios de apoyo y consejos lograron tranquilizarme en gran medida. Es gratificante después de todo recibir un buen trabajo habitualmente.
No hay que tener miedo, es al fin y al cabo una experiencia enriquecedora participar como tutor en Latinhire y les aconsejo de corazón probarla. Uno no nace con la habilidad para guiar a otros, pero sí que se puede desarrollar a voluntad.
La mejor de las suertes.
